Saigón y el final de la guerra…


Puse rumbo norte desde Can Tho, en el delta del Mekong y llegué  a Saigón  a eso de mediodía. Me soltaron en una de las cuatro estaciones de autobuses que hay en esta ciudad y tras dejarme querer un rato por las muchas novias que se ofrecieron a llevarme al centro, opté por hacerlo en moto, en la moto más viejita con el más viejito conductor de todos los que había en aquella ajetreada estación. Mi ignorancia me hizo pensar que no tardaría mucho tiempo en llegar, pero para mi desgracia subestimé el tamaño de esta gran urbe.

 



Como bien sabes, llevo dos mochilas conmigo, que además, o cada día pesan más o cada día yo estoy más débil… El caso es que el más viejito conductor de motos de todos los que había en aquella ajetreada estación, colocó mi mochila pequeña entre sus rodillas y me indicó que me pusiera la grande a la espalda. Y así, montado en la más viejita moto de todas las que había en aquella ajetreada estación de autobuses, emprendimos camino al centro.

45 minutos… todos estos son los que tuve que “sufrir” (y lo pongo entre comillas, porque en el fondo estas cosillas he aprendido a disfrutarlas más que a sufrirlas…), hasta llegar al centro. La mochila me vencía hacia atrás, no podía apoyar los pies en ningún lado, por lo que aguantaba el peso con los muslos y los riñones. Las rodillas me empezaron a temblar al poco de empezar y para cuando pude bajar tenía la sensación de haber corrido la Maratón de San Francisco.




Yo pensaba que había visto muchas motos en el Sudeste Asiático y efectivamente así ha sido, pero cuando llegué a Saigón me quedé asustado. Salen de todos los lados, se meten por aquí, por allá, se cruzan, se tocan, pitan constantemente mezcladas entre peatones, coches o carritos  y todo esto mientras sus conductores se piensan que no tienen una moto, sino una DKV que pueden cargar hasta reventar, como si fuera sólo una cuestión de guardar el equilibrio. Y si no me crees, te invito a que veas este video que grabé desde el balcón de mi habitación, que está situado en una calle “tranquila” de la ciudad…


Pero llegué, y lo hice directo a la embajada de China, con la intención de dejar el pasaporte unos días para obtener el visado de este pais, pero para mi sorpresa la encontré cerrada.

     -Excuse me… what time does it open?

    -Closed, you come back on Monday…

    -Yes, but I need to get my visa and I don´t…

    -Closed, you come back on Monday…

Aceptando que los vietnamitas sólo hablan más de la cuenta cuando quieren venderte algo, me marché de allí directito a una terracita a la sombra de un enorme árbol y me puse a beber cerveza, porque yo lo valgo… A cada cerveza que me bebía, menos ganas tenía de empezar a buscar hotel, pero mayor cara de felicidad se me iba poniendo mientras contemplaba el caos de ciudad al que acababa de llegar… ji.ji.. que pedillo más tonto me pillé, oye…




 

En cualquier caso, conseguí salir de ese estado de letargo, encontrar una habitación y aprovechar la tarde para dar el primer paseo por Saigón. Te voy a contar unas cuantas cositas de esta ciudad y te diré además, que ya tenía ganas de estar de nuevo en una gran ciudad, ya que desde el principio de mi viaje, en Kuala Lumpur, no he vuelto a pisar ciudades enormes y que quieres que te diga… a veces las echo de menos.

 





Lo primero que debería contarte, es que Saigón, ya no se llama Saigón, sino Ho Chi Minh City. Tu te preguntarás que narices hago yo llamándola Saigón todo el rato y yo te explicaré que lo hago por dos motivos: A) El nombre me parece mucho más exótico, además de corto. B) Sus habitantes y los vietnamitas en general, todavía la llaman mayoritariamente así, aunque oficialmente ya no sea su nombre.

Saigón fue Saigón hasta el 30 de Abril de 1975, cuando los comunistas del norte de Vietnam se hicieron definitivamente con el control de esta ciudad, principal bastión de Vietnam del Sur, llegando hasta el mismísimo cuartel general de sus dirigentes, el hoy conocido como Palacio de la Reunificación. Un tanque de las tropas del Viet Cong, derribó de un cañonazo la puerta principal del palacio y Vietnam del Sur se rindió a manos de los comunistas, significando este hecho el final definitivo de la guerra en Vietnam y la reunificación del país. La puerta es lo único que se ha reconstruido, pero el resto del edificio se mantiene exactamente igual que aquel año.

Palacio de la Reunificación





Para no aburrirte con demasiados datos históricos, simplemente te resumiré en unas pocas líneas la historia reciente de Vietnam. En 1883, los franceses impusieron en Vietnam el tratado de protectorado francés. En 1925, Ho Chi Minh fundó la Liga Revolucionaria de la Juventud Vietnamita, que se convirtió en la resistencia más eficaz contra el dominio francés.

Durante la segunda guerra mundial, los japoneses ocuparon Vietnam y los franceses salieron pitando. De nuevo fueron los comunistas los que ofrecieron una resistencia más eficaz. Al termino de la guerra, Vietnam se declaró independiente, pero los franceses hicieron un intento de volver a obtener el control del país, lo que tuvo una respuesta violenta por parte de los vietnamitas y estalló la guerra, que duró hasta Mayo de 1954, cuando los franceses decidieron rendirse y abandonar definitivamente Vietnam.



El país sin embargo se encontraba en una situación muy delicada debido a la división de sus gentes, los comunistas por un lado, guiados por Ho Chi Minh y los católicos anticomunistas por el otro, liderados por Ngo Dinh Diem. Por este motivo, a mediados de 1954 se llegó a un acuerdo en Ginebra para dividir Vietnam en dos, Vietnam del Norte (comunistas) y Vietnam del Sur (católicos).

Se dío un plazo de 300 días para que todos los habitantes decidieran en cual de los dos paises querían vivir y se pudieran mudar sin represalias si así lo deseaban. Se proyectaron elecciones para el año 1956, pero el dirigiente de Vietnam del Sur, Ngo Dinh Diem (que al parecer era un pieza…) se negó a participar en las mismas y poco después empezó la guerra civil.



Y aquí, aparecen una vez más nuestros amigos los americanos, que ante el temor de que Vietnam fuera dirigido por un gobierno comunista, decidieron intervenir para participar en una de las guerras más famosas de la historia.

Las primeras tropas americanas llegaron en 1965 y la guerra se prolongó hasta el anteriormente citado día de 1975, en el que el Palacio de la Reunificación cayó en manos comunistas y así sigue a día de hoy. El ejercito americano ya se había retirado dos años antes, cuando se dieron cuenta que los vietnamitas eran “duros de pelar”.


 

Uno de los ejemplos más claros que a día de hoy se conservan, de lo duros de pelar que eran los vietnamitas, son los túneles de Cu Chin. Estos tuneles fueron excavados por el Viet Cong para protegerse de los bombardeos americanos al tiempo que se aproximaban cada vez más a Saigón. Estos túneles son increiblemente estrechos y cuentan con una extensión de 250 laberínticos kilómetros por los que los combatientes vietnamitas se movían como peces en el agua.

 






Yo tuve la oportunidad de visitarlos y te puedo asegurar que no me quiero imaginar lo duro que tuvo que ser para esta gente hacer su día a día a través de ellos, ya que son tremendamente claustrofóbicos e incómodos.

También he de decir, para que quede constancia escrita, de que la excursión a estos túneles es válida para hacerse una idea de lo que allí sucedió y de como era la zona, pero eso es todo. La excursión es tremendamente turística y la han convertido en un circo guiado con miles de turistas que se pasan por alli diariamente. Nada recomendable bajo mi humilde opinión…

Y así pasé unos días en Saigón o Ho Chi Minh, como tu prefieras… donde además me reencontré con mi querida amiga Marta, que ha aprovechado sus vacaciones para venirse a Vietnám y  recorrer el país juntos, lo cual le agradezco tremendamente, ya que estoy seguro de que lo pasaremos pipa y además, lo de viajar sólo está muy bien, pero se agradece mucho tener a alguien de confianza con quien compartir las aventuras del camino. Os seguiremos contando por lo tanto!!


 

Comentarios Originales 2010:

Belén

Octubre 4, 2010

 ¡¡ bueno, bueno!!! los túneles del Viet Cong no son claustrofóbicos, son lo siguiente!!! y muy chula la sorpresita final!! je je

besos

Carmen herrero

Octubre 4, 2010

Estás muy muy, bueno en forma más mental que física, no te veo moviendo vino, así que cuidadín con esas cervecitas de más.

Leonardo

Octubre 4, 2010

Hola, mis disculpas por tan terrible error!(al hilo del anterior mensaje)

A mi también me gusta mas Saigón, mundialmente conocida por tan terribles sucesos (malditos charlys!), esperemos que no vuelvan a ocurrir, aunque lamentablemente ocurren con frecuencia en tiempos actuales.

Tengo que pedirte un favor, si encuentras un AK-47 (a ser posible inutilizado, ya sabes, problemas de aduana), reliquia de la guerra, no dudes en preguntar su precio, me gustaría tener uno.

Un beso para ambos.

Jose

Octubre 5, 2010

HOLA AMIGO ESPERO QUE TE ENCUENTRES MUY BIEN BUENOOOOOOOOOOOOOOOO POR AQUI LA COSA ESTA UN POQUITO PONIENDOSE MEDA LOCA CON LAS LLUVIA JEJEJJE Y QUE YA TE HAS ECHADO NOVIA O Q AMIGO BUENO LA JEFA ESTA DE LO MEJOR EN SU BUENA PLAYITA JEJEJEJE MUCHO RECUERDOS DE MY PARTE SOLO CUIDATE MUCHO AVER SI VES A PEKIN ESPRES EL PROGAMA DE CUATRO QUE YA S ESTA EMITIENDO BUENO NO TE MAREO MAS UN ABRAZO MUY FUERTE DESDE MADRID PARA MY BUEN AMIGOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO BAY BAY

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